LA SALUD.

La salud es el mayor tesoro con que cuenta la humanidad y los seres humano en particular.

Es evidente, que la salud no es sólo física, es también mental, es emocional, es espiritual y es sobre todo social.

Cualquier desorden en cualquiera de estas dimensiones del hombre, afectará a los otros componentes de la estructura del ser humano.

 Y esta desarmonía se manifestará de alguna manera en el componente somático, ya sea como una protesta del cuerpo, o simplemente porque a través de esta, la percibe nuestra conciencia.

En este orden, es comprensible que cada día la humanidad se vea obligado a introducir nuevos enfoques en este contexto y los profesionales de la salud se vean obligado a ir saliendo paulatinamente de una hegemonía médica que en su tiempo fue muy útil, más hoy es indispensable la atención de la salud por grupo multidisciplinario, abierto e interactivo.

Por ejemplo la salud emocional es tan definitivo para la salud física, así como la salud mental y espiritual. 
Cada área debe ser enfocado por profesionales muy bien formado en su área más con énfasis en salud física.  

El título de Psicólogo o Sociólogo o el mismo sacerdocio, no me da autoridad (aunque sí me autorice) a opinar sobre salud física, es más, aunque el psicólogo domine lo mental, el sacerdote lo espiritual, si no no profundizado su conocimiento en salud corporal aportará muy poco a la sanación del afectado.
los concepto que quiero plantear no es filosófico, si es un intento lingüístico pragmático.

Todos somos responsable de la salud, sin embargo el más responsable es el  afectado, es quien más debe aportar en la experiencia de retornar a la salud plena.

Si la causa de su afección es emocional o espiritual, y este se manifiesta a través del cuerpo, necesariamente deberá accionar el médico y aparentemente sanará su cuerpo es decir desaparecerá los síntomas), pero permanecerá la causa interna y más tarde o más temprano aparecerá de nuevo en otra parte del cuerpo y con síntoma diferente.

Profesionales y neófitos  necesitamos aprender y comprender las enfermedades, y sus causas, más que la propia enfermedad.

La enfermedad tiene un  propósito para quien la sufre, su obligación primaria es comprenderlo para poder realizar la parte que le compete a él.

El médico no necesita desde este punto de vista la comprensión, él por su propia formación profesional debe curar el cuerpo, es lo más urgente, para tal menester fue formado por la sociedad.

El afectado seguirá su desarrollo después  que el médico  se haya retirado, pues su función con la curación física ha culminado.

El afectado comienza su verdadero rol en el mantenimiento de la salud (que no lo puede realizar el médico) este es un espacio personalizado que sólo él puede realizar afectado para lo cual debe mantener en equilibrio sus distintas dimensiones física (elemento tierra, elemento agua, elemento fuego, elemento aire).

debe mantener en equilibrio los siete centro de energía y conciencia: los 7 chakras.



Debe de mantener en equilibrio su cuaternario inferior: su cuerpo físico, su cuerpo de energía su cuerpo emocional, su cuerpo mental.

El cuaternario inferior: es el cuerpo de manifestación del alma, que lo hace como una síntesis de las frecuencias vibratorio como un todo, expresándose a través del cuerpo físico como un elemento mas denso que expresa el estado de los demás, así como el sonido de una orquesta, expresa la armonía del conjunto.

Así el cuerpo es la expresión de un conjunto de sonido espirituales aun incomprensible por la mente no cultivada.




Vemos pues que la salud no es consecuencia de algo tan simple como la disfunción de una parte del cuerpo, o la manifestación de un dolor físico.

de hecho para una anomalía vibratoria se exprese en el cuerpo, este debe ser un vehículo habilitado para tal expresión, y uno de los elementos más facilitadores, es la acidificación sanguinea, TEMA DE NUESTRO PRÓXIMO ARTICULO.

mi cristo de sabiduría saluda a tu cristo de sabiduría.
Lic. E. Arce

Naturistas, Psicólogo  Fisioterapeuta, Diplomado en uso de plantas medicinales, EXPERTO EN MASOTERAPIA.